Ribeirao Preto, Brasil — El técnico Didier Deschamps trata de restarle algo de presión al delantero Karim Benzema en la antesala del encuentro potencialmente decisivo que disputará Francia el viernes contra Suiza.
Quien gane el duelo en Salvador dará un paso significativo para amarrar el primer lugar del Grupo E y posiblemente evitar un duelo contra la Argentina de Lionel Messi en los octavos de final. Francia tiene mejor diferencia de goles y podría quedar fuera del alcance de los suizos con un triunfo.
Suiza tendrá que contener a Benzema, quien anotó dos veces en la goleada por 3-0 propinada el domingo a Honduras, que se quedó con 10 hombres antes del entretiempo. Con ocho goles en los últimos siete partidos, el atacante pasa por el mejor momento de su carrera internacional justo en un año mundialista.
Sin embargo, Deschamps quiere que menos reflectores apunten al artillero del Real Madrid.
"No quiero que comience a pensar que está en una misión y que todo depende de él. Eso no es bueno", dijo Deschamps. "Todos creen en él, pero él debe seguir siendo el mismo y no pensar que lo que haga marcará la diferencia".
Los suizos abrieron con una victoria por 2-1 sobre Ecuador, pero el equipo de Ottmar Hitzfeld puede dar una mejor actuación que la ofrecida en ese intermitente cotejo.
Contra Honduras, los franceses tuvieron que cuidarse las espaldas, literalmente. Los catrachos los empujaron repetidamente por detrás en un duelo friccionado.
En cambio, el partido contra los helvéticos sería más bien un duelo táctico entre dos conjuntos muy bien organizados.
"Evidentemente, ellos estarán comprometidos, pero no será algo semejante a lo que tuvimos" contra Honduras, dijo Deschamps. "Su línea de ataque es muy diferente, con mucha mayor calidad individual, especialmente con los extremos que son sumamente participativos".
Deschamps envió a Antoine Griezmann por izquierda frente a Honduras, relegando al banquillo a Olivier Giroud, algo que decepcionó al delantero del Arsenal.
"Sería preocupante si él no se sintiera decepcionado. Pero Didier tiene que tomar decisiones. Fue una determinación estratégica la de elegir a un jugador que se siente cómodo jugando con pases cortos", dijo el asistente Guy Stephan. "Esto no significa que se vaya a tomar la misma decisión contra Suiza y Ecuador".
Aunque Francia tiene más calidad individual en posiciones cruciales —el arquero Hugo Lloris, el volante Paul Pogba y Benzema—, Suiza tiene la ventaja de ofrecer un mejor juego de conjunto.
"Han hecho un gran esfuerzo para el desarrollo de sus jugadores desde los 90. Fueron campeones mundiales en el nivel sub17, fueron finalistas de la Eurocopa en 2011 en el sub21 y algunos de esos jugadores están ahora en su equipo", dijo Stephan. "Han trabajado mucho con los jóvenes, y la selección se beneficia de eso ahora".
